América VS España… otra vez.
Virginia Guarinos nos presenta en “Fenómenos televisivos teenagers: prototipos adolescentes en series vistas en España”, un interesante ensayo que enfrenta la postura americana frente a la española. ¿Los oponentes? Esta vez son las series vistas y dirigidas hacia un público adolescente y preadolescente.
Por un lado, está el modelo americano, con series del tipo Hannah Montana, que presentan modelos adolescentes de éxito, salientando sus valores éticos y morales. En estas series están prohibidos los temas tabú y los protagonistas se enfrentan a simples problemas éticos que la gran mayoría de las veces tienen que ver con la amistad y que terminan resolviendo satisfactoriamente de una manera honesta. Es una imagen del mundo tintada de color rosa, que no muestra para nada lo que es la realidad.
Por el otro lado contratacan las series españolas. Poniendo como ejemplo la siempre famosa Física o química, vemos a unos personajes adolescentes excesivamente preocupados por el sexo, el alcohol y las drogas, y que prestan escasa atención a los estudios. En España parece tener más importancia resaltar el desenfreno juvenil y los problemas que el mismo termina por dar, en una muestra bastante exagerada de lo que es la juventud en la actualidad.
Así, tenemos dos corrientes radicalmente opuestas: la excesiva dulzura americana, con unos prototipos que no se adaptan para nada a la realidad; y el exagerado realismo español, que se fundamenta en destacar los malos hábitos juveniles, dando así también ese ejemplo a aquellos adolescentes y niños que las ven.
Virginia Guarinos prosigue en su ensayo destacando que los adolescentes son el grupo que mayores probabilidades tiene de ser afectado por los mensajes televisivos, además de analizar profundamente cada tipo de series y sus personajes. Pero no juzga en ningún momento la cuestión que nosotros queremos plantearos aquí, y que esperamos que abra un buen debate: el modelo americano o el modelo español ¿qué es mejor para los adolescentes?
TGP 3O
Posted on 3 Maio, 2011, in Sen clasificar and tagged Club de lecturas, Participación (TGP´s). Bookmark the permalink. 5 Comentarios.
Obviamente ningún dos dous extremos son os máis adecuados para mostrar os preadolescentes a realidade, pero á hora de elexir e a pesar da pésima calidade de calquera delas, elexiría ás sereis españolas polo feito de que aínda que mostren extremos da sociedade hoxe en día, soen mostrar tamén as consecuencias dos actos. Penso que protexer ós menores como fan en EEUU obviando temas tan peliagudos como drogas, alcohol e trastornos psíquicos non é a menor maneira de afrontalos.
En mi sincera opinión ni uno ni otro es bueno, como se afirma en el post, ninguno se ajusta a la realidad. Así mismo debemos darnos cuenta de que se tratan de series de ficción no basadas en hechos reales que tienen como fin el entretenimiento. Los americanos lo endulzan para los jóvenes (los programas de “adultos” son verdaderas barbaridades) y los españoles lo ponemos todo en lo peor. Por qué? concienciación social. Cada país vive la realidad de una forma diferente, los jóvenes reciben por ello una educación diferente. No sólo se observará en el caso USA-Spain, seguramente si lo comparamos con países árabes podemos ver grandes diferencias.
No es culpa de la televisión ni es mejor o peor. Recordemos que la televisión es entretenimiento, y las series del tipo que sean también. Está bajo la responsabilidad de los padres aprovechar las herramientas que se ofrecen para educar a sus hijos. Sería absurdo echar la culpa en el futuro de todos los males a la televisión. Por tanto, no es ni bueno ni malo, simplemente es entretenimiento. La educación es la base…las series, como he dicho: entretenimiento!
La pregunta no sería cuál es mejor, si bien ninguna muestra en sí una auténtica realidad, sabemos que los estadounidenses en sus producciones se caracterizan por eso, por darle un final feliz a todo y darnos la falsa idea de un mundo perfecto. Pero cuál creen que sea el motivo que siendo tan diferentes, ambas propuestas tengan tanto éxito?
Bueno, David. Estoy de acuerdo en que la televisión es entretenimiento, pero sirve más que para eso. Los pequeños se crían viendo cierto tipo de series, contenidos que asimilan y que de una manera u otra les marca. En el caso de América y Disney, tal y como tratamos en nuestro TGA, lo que la empresa pretende en sí no es entretener sino crear posibles consumidores de merchandising. Es decir, que la vida de estos personajes no es bonita por el mero hecho de hacer que los niños lo pasen bien, sino porque quieren hacerles creer que el mundo será como el de Hannah Montana si compran la camiseta oficial.
Esta tendencia no se manifiesta en las series españolas. Personalmente no he visto ningún producto de física o química, por poner un ejemplo. Entonces pienso que las series españolas, para atraer audiencias, reflejan lo “divertido” que hay en el mundo juvenil, ya que estudiar en principio no parece demasiado apasionante.
Entretenimiento sí, pero a una edad temprana lo que observas en la televisión (y no sólo en la televisión, en todo tu mundo) lo asimilas y adaptas para crear tu personalidad. Si los preadolescentes consumen cierto tipo de contenido, es más probable que lo utilicen como modelo de comportamiento.
Creo que se trata de casos distintos. Aunque ambas están destinadas a un público joven, la serie de Disney busca más entretener y hacer reir a niños y adoslescentes mientras que la serie de Antena 3 busca enganchar al espectador adolescente y joven adulto con tramas y giros en las relaciones de su personajes. Ninguno me parece mejor y no creo que los autores busquen realismo, sencillamente usan las herramientas para llevar a cabo la tarea que mencione. Por eso en estas series los exámenes son una subtrama dramática de un episodio (un examen no puede tomar todo un capítulo) y los deberes o los trabajos solo aparecen como forma de empujar a los personajes. Por supuesto los profesores son listos y son trabajos innovativos y nada que pudieses hacer buscando en google o en wikipedia, sino algo que implique mucho tiempo o una gran parafernalia. En el fondo son dos tipos de ficción en la práctica muy distintas pero en la estructura muy similares. Yo diría que es lo que pasa siempre que los adultos buscan crear una serie de ficción que apele a los adolescentes de ahora.