Mirando desde Plaza Roja los transeúntes (II)

El de hoy ha sido sin duda el post que más me ha costado escribir, no por el sol ni porque parece casi imposible no hacer referencia a que es el último, sino debido a que no funcionaba la barra espaciadora. Después destripar el ordenador y aprender que no debo fumar sobre el teclado, el cursor se ha mostrado amable y me ha dado una oportunidad.

Y como sucede muchas veces con las obligaciones que dejan espacio a hablar de lo que uno quiera, se me ocurren pocas cosas que puedan resultar interesantes. Resulta irónico no saber qué decir el día de la Libertad de Prensa, así que continuaré un post que dejé abierto hace dos semanas sobre la percepción que tengo de mí y de los demás en nuestra rol de transeúntes.

El otro día estaba con mi amigo Jesús comiendo una pizza en la Plaza Roja y vimos pasar a varios compañeros de la mano de sus parejas. No repararon en nosotros, así que mientras los seguíamos con la mirada comentamos con tranquilidad el comportamiento de las personas en función de con quien se encuentren. En ese momento, “X” advirtió nuestra presencia y en el novio que paseaba por la calle se encendió el piloto de quien ve como le coge a contrapié el cambio de papel. Por otra parte, si él no se hubiese dado cuenta de que allí estábamos no hubiésemos hecho ningún esfuerzo para remediarlo, pues nos resultaba gracioso ver su comportamiento en otro hábitat. Era como tener acceso a la superficie de otra de sus caras, distinta pero igual de cierta.

¿Qué “yo” somos? ¿El que está a solas, el que está con sus amigos, con su familia, con su pareja, o la impresión que de nosotros tienen los demás y que nunca podremos conocer completamente? Evidentemente somos todos ellos, o mejor dicho, son un “nosotros” complejo, de límites imprecisos. Es esa fluctuación la que nos da coherencia, nuestro humilde don de la ubicuidad, que a veces enciende la necesidad de encontrarse a uno mismo. ¿Cuál es ese mismo único?

Y cambio, corto y cierro.

Roura Blanco, Alejandro Antonio.      T7B  S3C

Posted on 3 Maio, 2013, in Posts individuais and tagged . Bookmark the permalink. 3 Comentarios.

  1. javieracortes

    Me ha encantado este post, tanto que casi se me olvida estar leyendo algo en un blog para clase.
    Creo que esos múltiples “yo” que conviven en cada persona forman parte de la naturaleza humana, aunque no siempre se lleve de una manera ideal. En mi opinión, el saber amoldarse a la persona con la que te encuentres en el momento es algo muy dulce y la perfecta ejecución de ello es un rasgo de la inteligencia, porque hay que hacer que esas distintas personalidades concuerden todas sin desentonar o se puede pecar de falso y bipolar.
    Lo más curioso viene, como describes tú mismo, cuando debes convivir con varios yo a la vez, y te encuentras con tu novio y tu mejor amigo, o con alguien a quién conoces muy bien rodeado de su grupo de amigos de siempre que resultan desconocidos para ti. ¿Nace un nuevo yo de estos encuentros mezclados?
    Opino igual que tú, que cada uno de nosotros está formado por todo un puzzle de personalidades que tenemos adaptadas a las distintas personas y situaciones. Quizás los sentimientos entre las personas se forman cuando uno decide crear un yo adaptado, único y exclusivo para otro, en el que, aunque persistan unas características básicas de fondo, nos amoldamos y cambiamos.
    Me encanta observar los comportamientos y reacciones humanas cuando saben que nadie les está mirando. Somos unos seres muy curiosos.

  2. Sí, eso es lo que trataba de reflejar. Esa capacidad de adaptación, a medio camino entre el disfraz, la educación y el saber estar. Justamente, amoldarse. Seguramente resultaría muy cansado ser siempre el mismo para todo, sobre todo teniendo en cuenta que estamos atados a los demás por mil relaciones: profesores, padres, conocidos, extraños…

  3. seminariocomunicacion3

    Un placer haber compartido contigo este momento y las reflexiones posteriores. Poco más que decir, Alejandro. Gracias.

    Silva Vilas, Jesús

Deixar unha resposta

introduce os teu datos ou preme nunha das iconas:

Logotipo de WordPress.com

Estás a comentar desde a túa conta de WordPress.com. Sair /  Cambiar )

Twitter picture

Estás a comentar desde a túa conta de Twitter. Sair /  Cambiar )

Facebook photo

Estás a comentar desde a túa conta de Facebook. Sair /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: