En compañía de la soledad
Soledad en medio de la muchedumbre. Incomunicación con quien compartes casa y cama. Aislamiento en uno de los lugares más poblados del planeta. Ese es para mí el significado de ‘In the mood for love’.
Como en las buenas películas, nada es casual. La historia se ambienta en un piso hipermasificado que se alquila por habitaciones, en una ciudad agobiante por la densidad de habitantes (más de dos millones en 1962, año en el que nos sitúa el argumento, en una superficie de poco más de mil kilómetros cuadrados, 25 veces menos que Galicia). Sin embargo, lo que reina es la soledad. Llega a ser opresiva para los protagonistas, unidos por el destino y separados por una pared, y que acaban por compartir su desventura en la búsqueda de calor humano y de explicaciones a su situación. Al final sus vidas toman rumbos divergentes y ya se impone, definitivamente, la soledad más absoluta.
Me pareció toda una metáfora de la vida. Todos somos una isla, necesitamos a otros pero solo tenemos garantizada nuestra propia compañía, en forma de pensamientos y reflexiones. Siempre nos guardamos para nuestra esfera de absoluta intimidad muchos secretos, lo mismo que hacen aquellos que nos rodean incluso en el ámbito más privado. Somos en parte desconocidos para los nuestros, y ellos para nosotros. Al final de nuestras vidas lo que predomina es la soledad, y solo nos quedarán nuestros recuerdos guardados -maravillosa alegoría- en el hueco de un árbol.
De la película me pareció genial la forma en la que se presentan al marido y mujer de los protagonistas. Los espectadores no llegamos a conocerlos, pero sí sabemos de su ausencia, lo que contribuye a reforzar la imagen de soledad.
Gallego Estremera T4A S2E
Posted on 4 Maio, 2013, in Posts individuais and tagged Gallego Estremera. Bookmark the permalink. Deixar un comentario.
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