Lo normal, una ilusión
– Quiero ser como los demás
– Gracias a Dios, no lo serás jamás.
Fragmento y fotograma de la película C.R.AZ.Y.
Zygmunt Bauman presenta en Epílogo como uno de los mayores objetivos de esta sociedad la búsqueda de la seguridad. Aunque parezca un objetivo colectivo, según el autor, cada uno busca la solución en su persona, esto se debe a la sensación de ansiedad que sentimos ante el caos que nos rodea, y buscamos el resguardo en nosotros mismos, como un refugio donde nada nos puede suceder. Los miedos que nos produce la rutina de la vida humana, como sentimientos que son, son intangibles, por eso tendemos a materializarlos y así hacer desaperecer algo de esa incertidumbre que nos corroe. Como consecuencia buscamos un culpable de la inseguridad existencial que sentimos y esta pena recae en los llamados extraños, todo aquello lejano, ajeno o simplemente diferente a lo que somos o conocemos. Así se explica que nuestro día a día es un continuo paseo por “superficies”, que de no ser atractivas o semejantes, tendemos a ignorar o incluso alejar de lo similar o conocido.
Lo dicho por Bauman me hace comprender que todos los similares entre ellos tienden a juntarse en “comunidades”, y a alejarse de las otras “comunidades” formadas a su vez también por semejantes. Los criterios para la similitud son diversos: cultura, raza, intereses, aficciones, parentesco o incluso apariencias físicas o enfermedades, lo que hace que, en muchos casos, algunas de estas “comunidades” se formen casi involuntariamente por la exclusión de las demás hacía ellas.
Este es un vídeo conocido por las redes sociales como “La mujer más fea del mundo”. Lizzie padece, junto con otra sola persona más en todo el mundo, una extreña enfermedad que altera su apariencia física. Pero, afortunadamente, Lizzie luchó, no contra sus inseguridades, si no con las inseguridades de toda una comunidad convencional que la rechazaba desde sus superficies.
http://www.youtube.com/watch?v=ak8EjMszkVg
También os recomiendo la película canadiense C.R.A.Z.Y. Veinte años desde el nacimiento hasta la madurez de Zac. El hijo predilecto de cinco hermanos hasta que se empieza a alejar de la vida católica, formal, y “clásica” que su padre tenía planeada para él. Una lucha por reprimir los sentimientos más íntimos y humanos, a cambio de la aceptación familiar. Un viaje por las emociones y relaciones de una familia amenizado por Pink Floyd o David Bowie, entre otros. Aquí os dejo el trailer.
http://www.youtube.com/watch?v=EwBk-hEgzkc
Creo que está inseguridad de la que habla Bauman también la perciben los seminaristas, protagonistas de nuestro proyecto. Parecen creer que su “superficie” no es aceptada por la mayoría, o eso es al menos lo que se deduce de las dificultades que tienen los otros compañeros de clase, no seminaristas, para hacer vida con ellos fuera de las horas lectivas; o por su insistencia en declararse “ gente normal”. Yo les reprocho con una frase de la película “The Addams Family”: lo normal es una ilusión, lo que es normal para la araña es caos para la mosca.
Añón Gándara, Amara.
Posted on 27 Febreiro, 2014, in Lecturas e filmes and tagged 141 B02, Añón Gándara. Bookmark the permalink. 1 comentario.
“Todos los similares entre ellos tienden a juntarse en “comunidades”, y a alejarse de las otras “comunidades” formadas a su vez también por semejantes” Estoy de acuerdo. Además, uno de los problemas a los que lleva esta forma de alejarse de las otras comunidades es aumentar la inseguridad. Si solo nos sentimos seguros con lo que conocemos, acrecentar la distancia con respecto a otras personas solo nos llevará a reducir las posibilidades de paliar nuestra ignorancia, de alcanzar la seguridad. Lanzamos piedras contra nuestro propio tejado, buscando aquello de lo que huimos.
PARDO CREGO, ALICIA 142.A04