Libertad laboral
Como ya sabes, y si no lo sabes ahora te lo digo, mi grupo y yo estamos trabajando sobre aCentral Folque, una organización que impulsa la música tradicional gallega.
En nuestra primera reunión, pudimos mantener una charla con un integrante que nos cedió una hora y algunos minutos para orientarnos un poco sobre la estructura y los antepasados de aCentral Folque. Una de las cosas que más me llamó la atención fue la manera de organizarse en cuanto al trabajo: dijo que todos iban bastante por libre. Normalmente, en todo trabajo hay un superior que dirige a los demás una pautas que estos deben seguir. Comúnmente le llamamos jefe. En otros casos cabronazo.
Esto me llevó a reflexionar hasta qué punto es conveniente la libertad en el trabajo, en cualquier tipo de trabajo. ¿Podemos realmente ser constantes cuando se nos cede la libertad de ser nuestro propio jefe? En cualquier caso puede ser puramente personal. En algunas ocasiones, puede que esa libertad se le ceda a una persona desorganizada, poco constante, poco paciente, no muy responsable o con otro tipo de prioridades; en otras, podemos cedérsela a alguien que lo de todo y que flexibilice los horarios a su antojo de manera que el resultado sea muy bueno. En todo caso, y como cada persona es un mundo, no me paré a pensar en las infinitas posibilidades personales que la libertad inculca pero, lo que sí quedó, como digamos en una idea fija, es que considero que la libertad en el ámbito laboral nos podría otorgar un amplio abanico de posibilidades y nos ayudaría en muchos casos a desarrollar nuestra creatividad sin ser oprimidos por unas pautas o normas. ¿Es posible? Se ve que sí.
Pedrosa París, Cintia 142 A05
Posted on 5 Marzo, 2014, in Posts individuais and tagged 142 A05, Pedrosa París. Bookmark the permalink. 2 Comentarios.
Respecto a este post, Sra. Pedrosa, conviría que pasara a falar comigo. Gracias
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